¡¿Cuál era el punto de todo esto?!

Boston Red Sox v Chicago White Sox | Quinn Harris/GettyImages

No hay tal cosa como un mal acuerdo de ligas menores, pero ciertamente hay tal cosa como un mal lanzador en un acuerdo de ligas menores. Los Yankees de Nueva York ciertamente sabían esa lección antes del domingo, pero la aprendieron nuevamente durante su lista de fin de mayo en el nivel Triple-A.

Después de una temporada en la que restó un notable 1.3 bWAR de los Medias Blancas y los Piratas combinados, ¡en solo nueve juegos en total! – los Yankees lanzaron a Jake Woodford una balsa salvavidas con un pacto de ligas menores. Después de todo, nunca se puede tener demasiado pitcheo. En caso de que Woodford hiciera clic, los Yankees también le ofrecieron una exclusión voluntaria a fin de mes para que pudiera buscar movilidad ascendente en otro lugar.

El domingo, los Yankees perdieron a Dominic Smith, quien ha estado machacando en Triple-A, pero está bloqueado tanto por Ben Rice como por el espectro de Giancarlo Stanton.

También perdieron a Woodford, ¿quién, eh … seguro?

Los Yankees liberan a Jake Woodford del contrato de ligas menores en Triple-A Scranton/Wilkes-Barre

Si los Yankees necesitan profundidad de lanzamiento adicional, y ciertamente lo harán pronto, con Luke Weaver bajo el clima y Carlos Carrasco ahora en el personal una vez más, pueden apuntar a Clayton Beeter y Allan Winans, dos opciones más altas en la lista de Scranton.

Woodford, la selección de Equilibrio Competitivo 2015 de los Cardenales, tuvo un éxito moderado en su papel de Yankees, pero no lo suficiente como para merecer un movimiento complaciente. En 10 salidas (siete aperturas), tuvo una efectividad DE 4.54, permitiendo más hits (45) que entradas lanzadas (39 2/3). Fue un pilar en la rotación de Scranton, para bien o para mal, pero su partida probablemente abrirá una oportunidad de oro para un prospecto de lanzamiento de los Yankees de alto nivel como Cam Schlittler o Brendan Beck, ambos funcionando bien en Double-A.

La adición de Woodford nunca tuvo mucho sentido en primer lugar, especialmente si los Yankees pensaban que no tenían nada en la cámara que pudiera desbloquear otro nivel dentro de él. Si estaban dispuestos a dejarlo ir después de dos meses de trabajo, está bastante claro que no creen en su lado positivo. Por lo tanto, es libre de deambular por la cabaña mientras los Yankees vuelven a dedicar sus esfuerzos a encontrar algo de profundidad adicional.