Qué onda gente.

Parece que el regalo de Papá Noel para caso este año fue nada más y nada menos que un embarazo.

Qué fuerte neta.

Me cuesta creerlo, pero es lo que está pasando En este preciso momento.

Cómo ha sido todo esto?

Pues enseguida te lo contamos.

Pero antes de todo, Recuerda que si de verdad apoyas a caso en esta nueva etapa de su vida, Dale me gusta y suscríbete al Canal porque se viene lo bueno.

Y no te preocupes que ella ya ha dicho que, aunque esté embarazada, seguirá sacando todas esas canciones con zakira.

Yo ya me muero de impaciencia por escuchar esas rolitas.

Era la mañana del 25 de diciembre y en la casa de kasu reinaba un ambiente de celebración y calidez.

Las luces del árbol de navidad aún parpadeaban en la sala y los restos de los regalos abiertos la noche anterior estaban cuidadosamente apilados en un rincón.

La familia aú llena de Del día anterior, se reunió temprano para compartir un desayuno especial.

En la mesa Todo estaba dispuesto con esmero.

Había café recién hecho, chocolate caliente espumoso, pan dulce y una variedad de platillos tradicionales.

La risa de los más pequeños llenaba el espacio mientras los adultos conversaban animadamente.

Casu, con un suéter cómodo Y el cabello recogido en una coleta, sonreía mientras observaba a su familia a suado.

Romeo Santos estaba relajado, Disfrutando del Ambiente familiar y riendo con un primo de casu que le estaba contando una anécdota.

Esto sí que es navidad de verdad, Julieta, le dijo Romeo, usando su nombre de pila.

Con cariño, ella sonrió mientras se llevaba un bocado de pan a la boca.

Sí, es bonito tener a todos juntos.

Hace tiempo que no me sentía así, respondió, mirando alrededor con ternura.

El malestar inesperado mientras el desayuno continuaba, kasu comenzó a sentirse extraña.

Al principio lo atribuyó a haber comido un poco más de lo normal la noche anterior, pero la sensación en su estómago comenzó a intensificarse.

Era como si una ola de náuseas estuviera subiendo, lenta pero implacable.

Disculpen, Regreso.

En un momento dijo rápidamente, dejando su taza de café casi llena sobre la mesa, se levantó y caminó apresurada hacia el baño, ignorando las miradas de preocupación de los demás.

Apenas cerró la puerta.

Se inclinó sobre el lababo, respirando hondo para intentar calmarse, pero no pudo evitarlo.

Vomitó, sintiendo como el sudor frío le cubría la frente y su cuerpo temblaba ligeramente.

Se apoyó en la pared del baño, tratando de Recuperar el aliento desde afuera.

Romeo tocó suavemente la puerta.

Amor, estás bien.

Qué pasó, preguntó con un tono lleno de preocupación.

Casu abrió un poco la puerta, dejando ver su rostro pálido.

No lo sé, creo que algo me cayó mal.

Romeo no lo pensó dos veces y la tomó de la mano, llevándola de vuelta al sofá en la sala.

El resto de la familia dejó sus conversaciones y se acercó, formando un círculo de preocupación alrededor de ella.

Quieres que te lleve al médico, preguntó Romeo con firmeza mientras acariciaba su ello.

Para calmarla, ella asintió lentamente.

Sí, por favor, Esto no se siente normal la búsqueda de un médico.

Comenzaron a hacer llamadas buscando un médico que pudiera atenderla, pero al ser 25 de diciembre, la mayoría de los consultorios estaban cerrados por el día festivo.

La desesperación comenzaba a notarse en los rostros de los presentes Y si vamos directo al hospital, sugirió la tía de kasu que estaba al tanto de la dificultad de conseguir atención en días festivos.

Romeo asintió rápidamente.

Sí, vámonos, es lo mejor.

Con cuidado, ayudó a caso a levantarse y se dirigieron al auto.

El trayecto al hospital estuvo en silencio, salvo por las palabras tranquilizadoras de Romeo, quien mantenía una mano sobre la suya Mientras conducía.

Ella cerraba los ojos intentando ignorar el malestar que seguía latente en urgencias al llegar al hospital.

El lugar estaba sorprendentemente tranquilo para hac un día festivo.

Una enfermera los recibió en la recepción y Romeo explicó la situación.

En pocos minutos, un médico joven apareció para atenderlos.

Buenos días, Soy el doctor Hernández.

Cuéntenme Qué ocurrió.

Dijo mientras los guaba a una sala de evaluación.

Comenzó con náuseas esta mañana y luego vomitó, explicó Romeo, mientras casu se sentaba en una camilla.

El médico miró a casu con atención.

Ha tenido otros síntomas, como fiebre o dolor abdominal, preguntó mientras anotaba detalles en una hoja.

No solo estás ganas constantes de vomitar y algo de cansancio, respondió ella, frotándose las manos nerviosamente.

Comió algo fuera de lo común: alimentos crudos o mariscos.

Siguió indagando el médico.

No desayuné, lo mismo que todos, y nadie más se siente mal, contestó el doctor.

Frunció el seño sin hallar una causa evidente.

Llamó a un colega con más experiencia, un hombre mayor, que llegó con aire tranquilo y seguro.

Buenos días, Soy el doctor Ortega.

Cuál es el caso, preguntó.

Revisando rápidamente las notas de Hernández, El doctor Ortega examinó A casu con detenimiento, haciendo preguntas adicionales sobre su historial médico.

Tras unos momentos se volvió hacia ella.

Señorita Julieta, Necesito que se dirija al departamento de ginecología, dijo con calma.

Kassu Lo miró confundida.

Ginecología.

Por qué no cree que sea algo como una intoxicación con el ceño fruncido.

El médico esbozó una leve sonrisa.

No lo creo.

Algunos de sus síntomas podrían estar relacionados con un posible embarazo, es mejor descartarlo antes de seguir explorando otras causas.

Romeo levantó las cejas sorprendido mientras casu miraba al médico con una mezcla de incredulidad y nerviosismo.

Embarazo repitió en un susurro.

Ortega asintió es solo una posibilidad, pero creo que deberíamos confirmarlo o descartarlo primero, sin decir nada más.

Casu tomó la mano de Romeo y ambos se levantaron para dirigirse al área de ginecología.

La incertidumbre flotaba en el aire mientras caminaban por los pasillos iluminados del hospital, con la sensación de que algo grande estaba a punto de cambiar en el consultorio del ginecólogo.

El consultorio estaba tranquilo, con una suave luz cálida que emanaba desde el techo, haciendo que el ambiente se sintiera acogedor.

Al, mismo, tiempo, algo tenso.

Casu estaba sentada en una silla frente al escritorio del médico, con las manos entrelazadas sobre su regazo, Mirando al doctor con una mezcla de incertidumbre y preocupación.

Romeo estaba a su lado, Mirando a su pareja y luego al médico, esperando ansiosamente respuestas.

El doctor, un hombre de mediana edad con una barba recortada y lentes de armazón delgado, sonrió amablemente al verlos llegar.

Sus movimientos eran tranquilos y seguros, como un profesional experimentado que sabía que iba a tener que lidiar con una situación delicada.

Muy bien, señorita Julieta, vamos a hacer algunas preguntas básicas para poder hacer una evaluación precisa.

Comenzó el médico mientras tomaba su libreta y un bolígrafo.

Los ojos de casu seguían fijos en el doctor, pero su mente estaba en otro lugar.

Toma algún tipo de anticonceptivo, preguntó el médico con calma, haciendo una pausa para mirar su libreta.

Kasu, un tanto nerviosa, no dudó en responder.

Pues la verdad es que no.

Su voz son no sincera, pero al mismo tiempo un poco avergonzada.

El médico asintió lentamente y escribió en su libreta.

Luego levantó la vista hacia casu.

Entiendo, usan algún otro tipo de protección durante las relaciones.

El médico, sin Mostrar juicio, continuó con las preguntas como si estuviera completamente acostumbrado a abordar este tipo de situaciones.

Casu miró a Romeo Por un segundo un poco incómoda.

Romeo, que había permanecido callado hasta ese momento, completó la frase de manera natural.

Normalmente Sí, pero la última vez no.

El ginecólogo levantó una Ceja y asentó con la cabeza como si todo tuviera sentido.

Ahora, Muy bien, gracias por su honestidad.

Eso nos da una idea más clara.

Ahora procederemos a hacer algunas pruebas para verificar la situación.

Está bien el momento de las pruebas caso se levantó aún un poco confundida y siguió al médico hacia una pequeña sala adyacente.

Romeo se quedó atrás sentado en la sala principal, revisando su teléfono y mordiéndose el labio con la preocupación reflejada en su rostro.

Pasaron unos minutos que se sintieron eternos caso.

Estaba acostada en una mesa de examen con las piernas ligeramente elevadas y los ojos cerrados, tratando de calmarse.

Pensaba en todas las veces que había oído historias sobre embarazos no planeados, pero nunca imaginó que una situación así podría sucederle a ella.

Pensaba en su carrera, en sus proyectos, en la gira que había comenzado a planear con zakira.

Cómo podía encajar todo eso en su vida ahora.

Finalmente, el doctor regresó a la sala principal con los resultados.

Se sentó frente a ellos, mirando ambos con una expresión tranquila pero profesional.

Bueno, señorita Julieta, tras realizar las pruebas, puedo confirmar que está usted embarazada, dijo el médico con voz Clara y firme.

Un nudo se formó en el estómago de casu.

Al escuchar esas palabras, su cuerpo se paralizó Por un segundo.

No podía creerlo.

Miró a Romeo, que inmediatamente le tomó la mano intentando transmitirle calma.

No puede ser Estás seguro, preguntó kasu su voz temblorosa, buscando alguna respuesta lógica.

El médico asintió tranquilo.

Sí, es totalmente seguro.

Los resultados muestran que el embarazo es reciente.

Tiene apenas unas semanas, pero el óvulo ya está fecundado y se está desarrollando.

Aproximadamente en 9 meses serán padres.

Casu sintió como si el aire se le escapara del cuerpo.

Todo comenzó a girar lentamente, pero fue la voz de Romeo lo que la sacó de sus pensamientos la sorpresa y la incertidumbre.

Pues, por mi parte, es una excelente noticia, verdad, dijo Romeo Mirando a casu con una sonrisa leve pero llena de Esperanza, le apretó la mano con cariño.

Esto es lo que queríamos.

No, casu lo miró con una mezcla de emoción y ansiedad.

Sí, sí, pero Tan pronto dijo en voz baja, más para sí misma que para Romeo.

Mientras Pasaba una mano por su cabello, sus pensamientos corrían A mil por hora.

Estaba feliz, pero también aterrada, cómo iba a encajar esta noticia con sus planes, con su carrera.

Acabo de empezar con mi gira, estoy trabajando en nuevas canciones y tengo una colaboración con zakira.

Cómo voy a manejar todo esto, preguntó Mirando al doctor y luego a Romeo, buscando respuestas, el ginecólogo asintió mostrando comprensión.

Es normal sentirse abrumada.

Señorita Julieta, el embarazo, especialmente en sus primeras etapas, puede causar mucha incertidumbre, pero con el apoyo adecuado y una buena organización, podrá continuar con su vida profesional.

Mientras atiende su salud y la del bebé, Romeo, sintiendo el miedo y la duda de casu, la miró a los ojos con determinación.

Mi amor, No te preocupes, Vamos a encontrar la manera de que sigas cantando, grabando y cumpliendo todos tus sueños.

No tienes que dejar nada atrás y yo estaré a tu lado en cada paso, apoyándote siempre.

Casu lo miró Y, aunque estaba abrumada, encontró algo de Consuelo en las palabras de Romeo.

Asintió lentamente, pero su mente seguía llena de dudas.

El doctor, notando la inquietud de la pareja, sonrió ligera.

Ente Les recomiendo que busquen una orientación adecuada.

Hay muchos recursos para mamás que Siguen trabajando y, con su talento y dedicación, estoy seguro de que encontrarán una forma de equilibrar todo.

Una nueva etapa.

Romeo sonrió y, tomando de nuevo la mano de casu, le susurró.

Lo que viene es una nueva etapa.

La vida está llena de sorpresas, Pero no te preocupes, amor, porque lo vamos a hacer juntos, siempre juntos.

Casu Lo miró Y, por primera vez en el día, una sonrisa ligera apareció en su rostro, Aunque su mente seguía llena de preguntas: cómo lo haría, qué le deparaba el futuro, pero en el fondo sabía que tenía a su lado a alguien que la amaba, y eso era lo más importante.

El ginecólogo les dio algunas recomendaciones más y les deseo lo mejor en este nuevo camino.

Luego, casu y Romeo se levant, se abrazaron y salieron de la consulta listos para enfrentar lo que vendría, aunque con una mezcla de emociones, la fiesta en familia de kasu y la reacción de Ángela y Cristian nodal.

Era 25 de diciembre y kasu había compartido en sus redes sociales un video mostrando la calidez de la Navidad en familia.

Con una sonrisa radiante, la cantante Argentina posaba junto a su pareja, Romeo Santos, rodeada de sus seres queridos mientras brindaban y compartían la alegría de la temporada.

La imagen de la felicidad era palpable, con todos Disfrutando del momento.

No faltaron los abrazos, las risas y la música navideña que daban vida al lugar.

El video de casu con la leyenda Navidad en familia, rodeada de amor y buenas vibras.

Que suerte la mía.

Árbol de navidad, estrellas dando vueltas, almohadilla, familia, almohadilla, Navidad, almohadilla, amor.

Comenzó a ganar terreno en las redes sociales, acumulando miles de likes y comentarios de apoyo en otro Rincón del país.

Ángela Aguilar y Cristian nodal estaban tranquilos en casa disfrutando de la Calma navideña.

Ángela, al ver la notificación del video de caso en su feed, no pudo evitar fruncir el seño.

Ángela murmurando para sí misma: Ay Dios.

Y ahora qué mira, nada más la reina casu Subiendo fotos con Romeo.

Qué casualidad.

Cristian, que estaba sentado en el sofá leyendo mensajes en su teléfono, levantó la vista y vio la expresión de Ángela.

Cristian con curiosidad.

Qué pasó mi amor?

Por qué estás tan seria, Ángela, enfadada?

Ah, pues mira, no sé si me da coraje o me da risa, pero casu la que siempre se pone en el centro de todo.

Ahora, subiendo su video familiar como si fuera la estrella del momento, Cristian se acercó notando como Ángela iba de un lado a otro mientras pasaba los dedos por la pantalla de su celular.

Cristian burlón, intentando quitarle tensión.

Te molesta que sea feliz.

Ya sabes que a veces nos tomamos demasiado a pecho esas cosas de las redes.

No, Ángela lo miró con una mezcla de sorpresa y molestia, Ángela, dándole un golpe en el hombro.

No es eso, Cristian, es que siempre tiene que ser ella, no la que sube todo, la que muestra su vida perfecta con Romeo y su familia ideal, como si todos fuéramos a caerle de rodillas.

Y ahí la tienes, publicando todo como si no hubiera otro día más importante en el año.

Cristian, que no entendía muy bien el nivel de incomodidad de Ángela, suspiró y se levantó acercándose para intentar calmarla.

Cristian, hablando con voz suave: Mira, te entiendo, pero tampoco te pongas así.

No, todo tiene que ser competencia.

No, cada quien tiene su manera de vivir las cosas.

Ella tiene su momento, pero eso no te quita nada a ti, Ángela.

Sin dejar de mirar el teléfono, soltó una risa sarcástica.

Ángela, irónica, mi momento, Claro, mi momento y cómo lo voy a encontrar.

Si siempre hay alguien más pisándome los talones, kasu, sakira, quién sigue, ya no puedo ni respirar tranquila.

Cristian frunció el ceño, confundido por la mezcla de celos y frustración que sentía Ángela.

Cristian, más serio, Mirando a Ángela a los ojos.

Ay, mi amor, Por qué no dejas de compararte?

Las cosas no son tan malas ni todo es un juego de rivalidades.

Acaso te hace falta eso?

Que alguien te dé el reconocimiento que crees que te mereces, porque, de verdad, tú Eres increíble y no tienes que estar peleando con nadie Para probarlo.

Ángela, levantando la voz un poco ofuscada, no me entiendes.

Es que parece que todo el mundo quiere pasarse de listo.

Kasu tiene a todo el mundo detrás de ella y ahora se la pasa publicando fotos como si fuera la más bendecida del planeta.

Qué se cree en ese instante, Cristian tomó el teléfono de Ángela, vio el video de casu y lo devolvió a su lado con un tono tranquilo, aunque ya sabía que no era el momento adecuado para discutir.

Cristian, con Tono firme, tú tienes lo tuyo, Ángela, y eso nadie te lo quita.

No todo es cuestión de lo que ves en instagram.

A veces las redes nos hacen creer que todo es tan perfecto, pero no todo lo que brilla es oro.

Me entiendes, Ángela.

Se cruzó de brazos y dejó caer la cabeza en el respaldo del sillón, Ángela, diciendo con frustración: sabes qué, Cristian.

No sé si quiero seguir peleando por lo que ya tengo o si simplemente me doy por vencida.

No sé qué hacer.

Verla Siempre encima con todo su mundo ideal me pone mal.

Cristian suspiró y se acercó para abrazarla, buscando calmarla, Cristian, serio, pero con ternura.

No dejes que todo te afecte tanto.

Lo que está pasando en las redes no es lo que mente.

Importa, casu, tendrá lo suyo, pero tú también tienes mucho, Ángela, y no es cuestión de ser mejor que alguien más.

Es cuestión de saber quién eres tú, Ángela.

Aún molesta, pero tocada por las palabras de Cristian, suspiró profundamente.

Al menos Había algo en su interior que comenzaba a calmarse.

Mientras, tanto, en el lado de casu, Caso había dejado su teléfono sobre la mesa de la cocina mientras tomaba una taza de café con Romeo.

De pronto, al revisarlo, vio que su video había alcanzado una gran cantidad de interacciones, y uno de los comentarios que más destacó fue el de una fan que preguntaba qué pensaba Ángela Aguilar de la noticia kasu sonriendo para sí misma?

Qué pensará Ángela de todo esto?

Yni me sorprende, pero sin darle demasiada importancia, casu y Romeo se miraron Cómplices sin saber que al otro lado la situación se cocinaba A fuego lento.

Caso era consciente de la reacción de Ángela, pero decidió seguir su camino disfrutando el momento con su familia y su pareja.

Para ella, lo único que importaba era estar bien, estar rodeada de amor y poder compartir sus logros sin necesidad de comparaciones ni competencias.

Casu a Romeo sonriendo.

Yo sigo con mi camino, cariño, lo demás ya no importa tanto.

Romeo, tomándola de la mano, claro, mi amor a seguir brillando y disfrutando cada paso.

Este es tu momento, caso asintió, y ambos se abrazaron sabiendo que la vida les tenía mucho por ofrecer, sin importar lo que pasara en las redes.

Y ah, T foreign.