Amargo: La victoria de la estrella de los Orioles de Baltimore, Trevor Rogers, en su debut de temporada enloqueció a los fanáticos de los Medias Rojas al criticarlos por ser demasiado “ruidosos” pero incapaces de detenerlo
Lo que comenzó como una noche de esperanzas renovadas para los fanáticos de los Boston Red Sox terminó en una amarga dosis de realidad, cortesía del lanzador de los Baltimore Orioles, Trevor Rogers, quien no solo brilló en su debut de temporada, sino que también encendió la polémica con declaraciones que dejaron a la afición de Boston al rojo vivo.
Rogers, quien fue adquirido en la temporada baja y había estado fuera por lesión, volvió al montículo con una actuación dominante, lanzando 7 entradas sin permitir carreras, ponchando a 9 bateadores y silenciando por completo una alineación que había mostrado poder en los últimos juegos.
Pero lo que realmente enfureció a la afición de los Red Sox no fue solo su desempeño, sino lo que dijo después del juego:
“Sabía que serían ruidosos. Es Boston. Pero al final del día, hacen mucho escándalo para nada. No pudieron tocarme. Que griten todo lo que quieran.”
La declaración, transmitida en vivo durante la rueda de prensa posterior al partido, se volvió viral en segundos. Las redes sociales se inundaron de reacciones, algunas defendiendo la confianza del lanzador y muchas otras acusándolo de falta de respeto.
Un fanático respondió en X (Twitter):
“Trevor Rogers puede haber ganado hoy, pero que no se confunda: en Fenway, recordamos. Y le vamos a hacer tragarse esas palabras cuando regrese.”
Los Orioles, por su parte, celebraron la victoria como una declaración de intenciones en una temporada en la que buscan consolidarse como contendientes serios en la división. Y con un Rogers encendido —tanto en el montículo como ante los micrófonos—, queda claro que los próximos enfrentamientos entre Baltimore y Boston tendrán una carga extra de tensión.
La rivalidad está viva, y ahora tiene un nuevo villano con el número 28 en la espalda.