¡El mundo de las MMA está en llamas después de que Jon “Bones” Jones respondiera con un desafiante “UFC no me va a quitar el cinturón” en respuesta a la creciente presión por su negativa a enfrentar al campeón interino de peso pesado Tom Aspinall! La controversia, que se ha prolongado durante meses, alcanzó un punto de ebullición a medida que los fanáticos y los luchadores exigen acción, pero Jones sigue siendo inflexible, preparando el escenario para un enfrentamiento que podría sacudir a la UFC hasta la médula.
Jones se mantiene firme
Jon Jones, el indiscutible campeón de peso pesado de UFC con un legendario récord de 28-1-1, acudió a las redes sociales el sábado por la noche para abordar los rumores de un posible despojo del cinturón. Con más de 150.000 firmas en una petición pidiendo a la UFC que eliminara su título (fuentes web), y la creciente frustración por su inactividad desde que derrotó a Stipe Miocic en noviembre de 2024, Jones se duplicó. “UFC no me va a quitar el cinturón”, publicó, y agregó: “Me he ganado esto, que lo intenten.” La declaración se produce en medio de especulaciones de que el presidente de UFC, Dana White, podría imponer una fecha límite para que Jones pelee contra Aspinall o desocupe el título, una medida que algunos expertos sugieren que podría ocurrir ya en noviembre en el Madison Square Garden (fuentes web).
Jones, de 37 años, se ha enfrentado a acusaciones de esquivar a Aspinall, el campeón interino que ha estado esperando 18 meses para una pelea de unificación. La leyenda estadounidense, conocida por su récord de 16 victorias en peleas por el título, ha insinuado su retiro y se ha burlado de otros enfrentamientos, incluido un posible enfrentamiento con Alex Pereira, alimentando aún más el fuego. Su último arrebato sugiere que confía en que la UFC protegerá su estatus, a pesar de que la división se estancó bajo su reinado.
La frustración de Aspinall y la indignación de los fans
Tom Aspinall, la potencia británica con un récord de 15-3 y una tasa de finalización de primera ronda del 93%, ha expresado cada vez más su opinión sobre el retraso. Después de defender su cinturón interino contra Curtis Blaydes en julio de 2024, ha pedido que Jones sea despojado, argumentando que el deporte merece claridad. “Estoy listo, Jones no”, dijo Aspinall recientemente, haciéndose eco de los sentimientos compartidos por luchadores como Michael Bisping, quien ha instado a Jones a “defender o desalojar” (fuentes web). La petición, compartida ampliamente por Aspinall, ha amplificado el descontento de los fanáticos, y muchos etiquetan la renuencia de Jones como una “mancha en el deporte”.
Las redes sociales están en erupción, con publicaciones encontradas en X que muestran una división: algunos aclaman a Jones como el mejor y defienden su legado, mientras que otros exigen el ascenso de Aspinall, calificando la inacción de Jones como “espantosa”. “El debate se ha intensificado a medida que la recuperación de las lesiones de Jones y los tuits crípticos de Tailandia han mantenido sus planes en el misterio.
El dilema de UFC
La UFC se encuentra en una encrucijada. Con Jones defendiendo el cinturón solo una vez desde que lo ganó en marzo de 2023 contra Ciryl Gane, y su próxima pelea aún por programar, la promoción enfrenta presión para actuar. Dana White no se ha comprometido, pero los informes sugieren que una fecha límite de noviembre podría forzar la mano de Jones, o despojarlo del título, entregándoselo a Aspinall. El estancamiento de la división de peso pesado ha llevado a la especulación de un boicot, con los fanáticos amenazando con alejarse a menos que ocurra la pelea de unificación.
Los analistas advierten que despojar a Jones, ampliamente considerado como el mejor peleador de MMA de la historia, podría alienar a una parte de la base de fanáticos, mientras que dejarlo sostener el cinturón sin defenderlo corre el riesgo de dañar la credibilidad de la UFC. La tensión la ha convertido en una de las historias más polarizantes de la historia de las MMA.
¿Que sigue?
Con el reloj corriendo hacia un posible enfrentamiento en noviembre, todos los ojos están puestos en el UFC para resolver el enfrentamiento. ¿Jones finalmente se enfrentará a Aspinall para silenciar a los críticos, o su desafío conducirá a un despojo histórico del cinturón? El trono de peso pesado pende de un hilo, y el mundo de las MMA se está preparando para el impacto.
¿Qué te parece? ¿Debería Jones defender su cinturón o desocuparlo? ¡Comparte tu opinión a continuación!